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¡Mujer, si te enojas no peques!

<<Si se enojan, no permitan que eso los haga pecar. El enojo no debe durarles todo el día. >>  Efesios 4:26 BLS ¿Sabes cuál es el límite de enojarse sin llegar a pecar?  Aquí algunos ejemplos de lo que es enojarse sin pecar: -Cuando surge de un verdadero celo por Dios y de la  religión. -Cuando no se enciende contra personas; sino por los pecados de ellos, como: el vicio y la inmoralidad de  todo tipo, con la idolatría y el culto idolátrico.  -Cuando un creyente se disgusta con sus propios pecados. -Cuando se oponen a la gloria de Dios, y a la promoción de los intereses de Cristo. -Contra toda falsa doctrina. -Cuando ves a alguien actuar con injusticia. -Cuando alguien te quiere hacer quebrantar los principios divinos. ¿Y cuándo enojarse es pecado? -Cuando algo de lo expuesto arriba causa malos efectos  y excedes a los límites debidos, y no demuestras  dominio propio ante las circunstancias, y para defenderte dices  palabras...

¡Yo tengo más fe que aquella hermana!

Al igual que yo, de seguro has escuchado cuando llega una hermana nueva a la congregación decir:  ¡hay que ponerle pilas a tal hermana para que sea más activa, se la ve muy seria y callada! ...y en esto creo que debemos tener mucho cuidado. Ya que existen mujeres cristianas de diversas edades cuya fe brilla siendo pasivas, calladas tranquilas; y otras cuya fe brilla siendo más activas y más servidoras.  Y es que las diferentes pruebas y experiencias de diferentes grados que atravesamos nos hacen mostrarnos a veces con una fe pasiva en cierto tiempo. Por esto solo nos queda el motivarnos a no descuidar el fuego - la pasión por las cosas de Dios, y  no tratar de forzar y crear a una hermana igual a mi persona. Cada una de nosotras pertenecemos a la familia de Dios. Y todas de acuerdo a nuestra fe, a los dones que se nos otorgó llegamos a dar fruto en su tiempo, para la gloria de Dios. ¿Y dónde es que vemos claramente estas dos clases de mujeres?  esto se encuentra en...

Una Joven en las manos de Dios

Hoy en día vemos con mucha tristeza como esta generación se va degradando de la manera más terrible, jóvenes que van tras sus propias pasiones, lleno de desenfrenos y actos liberales perversos.  No quieren oír y saber sobre el bien, sobre Cristo y Su santa Palabra. Ignorando las terribles consecuencias que obtendrán por sus pecados, y de la paga que está les otorgará.  Soy una joven que creció en un hogar cristiano, desde muy pequeña fui instruida en las cosas del Señor por mis padres, se me enseño a temer a Dios y a honrar Su Palabra, debo decir que el guardar todo esto, me libro y restringió de cometer pecados degradantes en esta parte de mi juventud. Hasta el día que el Señor me otorgo Su gracia de salvación, le estoy muy agradecida a mi Dios por bendecirme, y darme una vida nueva, y un nuevo corazón.  Siento mucha pena que esto no haya sucedido así con mis hermanas de sangre, que a pesar de que ellas crecieron conmigo escuchando las mismas cosas de Dios, con ...

Haciéndose Ella Misma Hermosa

(Mabel Hale- 1922)   "Engañosa es la gracia y vana la hermosura; la mujer que teme al Señor esa será alabada" Proverbios 31:3 A veces, para mi diversión, he leído en las revistas esas cartas cómicas que las niñas escriben a los especialistas en belleza. Si estas cartas podrían unirse todas, en una sola, sería leer algo como esto: ¿Cómo puedo hacerme tan hermosa, y ser admirada por mi buen aspecto? , ¡quiero librarme de todos mis defectos, mis pecas, y respingar mi nariz, mis espinillas y mi pelo fibroso! ¡Me gustaría tener mis manos y brazos muy bien formados,  me gustaría ser ni demasiada gruesa ni demasiada delgada! Dígame, señorita especialista,  ¿cómo puedo hacerme hermosa? El hombre sabio de la antigüedad ha respondido a esta pregunta en palabras que son más apropiadas:  "Engañosa es la gracia y vana la hermosura; la mujer que teme al Señor será alabada". Toda muchacha es amante de la belleza <<Hermosas casas, hermosos muebles, flores he...

Una Joven realizada

  "Está atenta a la marcha de su hogar y no come el pan de balde."  Proverbios 31:27 Leí en la columna de la sociedad de un periódico, las alabanzas de cierta madre hacia su hija, refiriéndose hacia ella como cierta mujer joven y realizada, y la razón dada para llamarla por este altisonante término, reside en el hecho de que podía cantar, tocar bien el piano, pintar, y hablar tres idiomas, etc.  Me causo mucha risa al leer esto; porque desde mi punto de vista, estos no son los logros máximos que una joven necesita. Estas cosas son buenas en su momento, y si una niña puede adquirirlos es afortunada; sin embargo las mejores realizaciones están al alcance de cada niña emprendedora y fuerte. En primer lugar una jovencita debe aprender cómo mantener una casa limpia y ordenada. Ella no sólo debe conocer cómo cuidar y tener en orden una habitación - ella debe realmente conocer el trabajo y hacer lo necesario para acondicionarla. Ella debe saber cómo hacer las camas, b...

¡Madre, ayuda a formar el carácter de tus hijos!

"Que cada uno mire cómo edifica."  1 Corintios 3:10:15 El tesoro terrenal más preciado que una chica puede tener, es su carácter. Su carácter representara lo que realmente es. Si una joven se observara más allá de lo que ella misma se ve, o de lo que la gente piensa de ella - y examina su corazón de una manera justa y honesta, juzgándose a sí misma por los estándares del bien y del mal, de lo que su propia conciencia sanciona - entonces ella conocería si posee un buen carácter. Y esto le será de consuelo cuando sea mal entendida y mal juzgada en determinado momento, porque conoce en lo profundo de su corazón que actuó correctamente. El carácter no se nos regala al nacer – todos tenemos que construirlo. Otros pueden proporcionar el material, poniendo delante de nosotros normas e ideales correctos, pueden darnos la reprensión y la corrección, también pueden guiar nuestras acciones y moldear nuestros pensamientos - pero despu...

Padres cristianos con hijos incrédulos

Hace poco me sucedió algo, y les voy a compartir este suceso con mucha sinceridad, y amor en Cristo, con el fin de que como madre cristiana, aprendas y fortalezcas esta área de la instrucción, disciplina, trato, convivencia, e influencia cristiana que debes tener sobre tus hijos incrédulos. Las Escrituras nos dicen que nuestros afectos tienen un orden y no se trata de decir amo a Dios solo de palabra, sino que verdaderamente tendrás que darte cuenta que a veces con nuestras acciones priorizamos el amor hacia los hijos y no a quien le corresponde esto es a Dios. Sé que hay muchas madres cristianas que al igual que yo, también en determinado momento han caído en pecado, y quizás no solo una vez, peor aún, continúan pecando por amor a sus hijos, reincidiendo y abrigando esto como algo que Dios aprueba. Les contare que cierto día: ....Sonó el teléfono, y fui presurosa a contestar, al levantar el auricular mi hija me dijo en voz baja y con señas: si es para mí ¡dile que no estoy!, ¡por fa...