Cuando entregué mi vida al Señor el 16 de Septiembre del 2006, nunca hubiera imaginado los planes que Dios tenía para mi vida. Eran planes que yo nunca hubiera ideado. Desde que nací de nuevo el Señor empezó a transformar mi manera de pensar, mi manera de sentir y al mismo tiempo empezó a transformar mi manera de actuar. Sólo por Su Gracia el Señor me llevó de ser una mujer independiente y controladora, llena de rencor y de orgullo, donde todas mis prioridades estaban fuera del orden divino, a ser una mujer sujeta a Su Palabra. Él me ha ido transformando y cambiando a través de La Escritura, a través de mi comunión personal con Él, a través de mi pastor y de mujeres sabias y piadosas que el Señor ha puesto en mi camino. En ese tiempo fue cuando conocí a la hermana Laura González de Chávez y desde entonces me puse a su disposición para ayudar en cualquier ministerio. Recuerdo que desde entonces Laura me decía que había una posibilidad de hacer algunas traducciones para el m