"Alzare mis ojos a los montes; de donde vendrá mi socorro?" (Salmo 121:1) Este es un precioso Salmo el cual nos enseña la bendición que tenemos en Dios como refugio y guardador. Como cristianos sabemos que nuestro caminar con Dios no es fácil. El nunca nos dijo que seria fácil, pero si que en medio de nuestras tribulaciones, El estaría con nosotros y nos guardaria de todo mal. El contenido de este Salmo nos revela de que manera podemos confiar en Dios. Verso 1: Alzare mis ojos a los montes de donde vendrá mi socorro? En su peregrinaje a la ciudad Santa, los Israelitas se veían rodeados de muchos montes donde podían contemplar la grandeza del creador; pero tambien para los paganos servían de refugio y protección y aun para centros de adoración a sus dioses. Como hijos de Dios en muchas ocasiones tambien miramos a nuestros alrededores, especialmente en tiempos de dificultad y nos hacemos la misma pregunta, ¿de donde vendrá mi socorro? Verso 2: Mi socorro viene de Jehov