"En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. (Efesios 4:22-24) Decir que somos cristianos, no nos hace cristianos. Pero cuando pertenecemos a Cristo, vivimos como cristianos. Andar como es digno de Dios tiene un requisito primordial, y este es: Haber nacido de nuevo. El Señor transforma, moldea maravillosamente a aquellas que son Sus hijas, a aquellas que tienen una vida nueva en El. Por la Biblia sabemos que el Señor Jesucristo allá en la cruz limpio nuestros pecados una vez y para siempre. Ahora tenemos una nueva posición, somos justificadas por la fe en El, ya que El tomo nuestro lugar, sufrió de parte de Dios el Padre el castigo que nosotras merecíamos, para así darnos salvación. Bueno, esa es ahora nuestra maravillosa realidad. Somos salvas por medio de Aquel que no