Carmen Espaillat: Hay algo hermoso acerca de las mujeres que honran a sus madres. Mujer 1: Cada mañana y luego al acostarnos siempre orábamos a Dios, ahora entiendo que la oración era el medio para enfrentar los obstáculos que teníamos como familia y el acercarse a Dios como refugio era nuestra fortaleza. Mujer 2: Fue en medio de sus rosas que me enseñó a apreciar lo maravilloso de la creación de Dios, a dar las gracias con una sonrisa, la compasión, a negarse a sí misma y amar sacrificialmente. Mujer 3 : El testimonio de una mujer piadosa perdura más allá de su permanencia aquí en la tierra. Tengo el privilegio de ser la hija de una de ellas. Mujer 4: Damos muchas gracias a Dios por ellas, su ejemplo ha sido un poderoso aliado que Dios ha usado para enseñarnos lo que es la centralidad del hogar y la familia según el diseño que ha dispuesto nuestro Señor. Mujer 5: Tengo muy presente en mi memoria el despertarme temprano para ir la escuela y encontrarte teniendo tu t