Por Steven Lawson
Pocos influencias afectan el corazón del hombre hacia Dios más que su esposa, para bien o para mal. Ella le animará a su devoción espiritual al Señor o ella se lo impedirá. Ella o bien ampliara su pasión por Dios o ella verterá agua fría en ella. ¿Qué clase de mujer estimula el crecimiento espiritual de su marido? Proverbios 31:10-31 ofrece un perfil de la mujer que es digno de la confianza de su marido. Esta mujer es la encarnación de la verdadera sabiduría de Dios, haciendo que el marido confié en ella con total confianza.
“Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas” (v. 10). Tal buena esposa es difícil de encontrar. La palabra virtuosa (hayil) puede significar “fuerza, capacidad, valor, o su dignidad.” Esta mujer es un ejemplo de cada una de estas cualidades, que tiene una gran competencia, carácter noble, y un fuerte compromiso con Dios y su familia. Sólo el Señor puede proporcionar una excelente mujer: “La casa y las riquezas son herencia de los padres; Mas de Jehová la mujer prudente.” (Prov. 19:14). “El que halla esposa halla el bien, Y alcanza la benevolencia de Jehová.” (18:22). Esta mujer virtuosa es un don inestimable de Dios.
“El corazón de su marido está en ella confiado” (v. 11)? El marido tiene fe en ella porque “Le da ella bien y no mal Todos los días de su vida.” (v. 12). Ella trae sus muchos puntos fuertes en su matrimonio, cada uno especialmente adecuado para complementar sus debilidades. Sus dones se convierten inmediatamente en sus ganancias, y ella provee mucho que le hace confiar en ella?
SU SERVICIO
En primer lugar, esta mujer extraordinaria incansablemente le sirve. No se sienta con los brazos cruzados, ella activamente “Busca lana y lino,” entonces extiende una “Y con voluntad trabaja con sus manos” (v. 13) para hacer girar hilo y hacer material. Ella es “como nave de mercader” (v. 14), poniendo en marcha para encontrar la mejor tela, al mejor precio, con el fin de tomar las mejores ropas. Esta esposa abnegada “se levanta aún de noche” (v. 15) para preparar la comida para su familia. Un excelente administrador, ella supervisa “sus doncellas,” mientras sirven junto a ella en la casa.
SU ÉXITO
En segundo lugar, esta mujer emprendedora ejerce el buen juicio en sus muchos tratos. Ella astutamente “considera un campo,” y luego lo compra. Allí, planta una “viña” (v. 16). Por su “fuerza” (v. 17) resuelve, ella gana ingresos disponibles para su familia. Estas relaciones comerciales “van bien” (v. 18), proveyendo recursos adicionales para compartir con los demás. Ella labora hasta bien entrada la “noche” con su “rueca” y “huso” (v. 19) para hacer prendas de vestir para su familia.
SU SACRIFICIO
En tercer lugar, esta mujer diligente da generosamente a los “pobres” y “necesitados” (v. 20). Al acercarse “la nieve”, también le da a su familia. Ella ha planeado con anticipación, haciendo prendas de vestir “escarlata” (v. 21) para su hogar. Ella no escatima ningún esfuerzo o costo en ofrecer lo mejor que puede. Después de dar a los demás, esta mujer trabajadora tiene “cubiertas de cama y ropa” y prendas “para sí misma” con “lino fino y púrpura” (v. 22). Su capacidad de dar vestidos costosos es una clara evidencia de la gracia de Dios en sus labores.
SU ASTUCIA
En cuarto lugar, sus muchas virtudes mejoran la posición de su marido en “las puertas” (v. 23), donde los líderes de la ciudad se encuentran. Con astucia aguda, esta mujer virtuosa “hace,” “vende” y “provee” (v. 24) sus bienes. A pesar de ser muy competente, ella no compite con el liderazgo de su esposo, sino que lo apoya mediante su humilde sumisión –y todo el mundo lo sabe.
SU FUERZA
En quinto lugar, esta preciada esposa mira hacia el futuro con “fuerza” y “honor” interior (v. 25). A pesar de que se anticipa a muchos desafíos, sin embargo, “ella se ríe” (v. 25) con confianza positiva en el cuidado providencial del Señor. Ella está expectante de que la provisión del cielo suplirá a su familia todas las necesidades. Al buscar de su consuelo las personas, ella habla palabras de “sabiduría” y “bondad” (v. 26) a ellos. Aunque ocupada fuera de la casa, ella no descuida “su casa” (v. 27).
SU SUPREMACÍA
En sexto lugar, ella es una madre tan fina que mientras sus hijos observan su excelencia, “la llaman bienaventurada” (v. 28). Su marido ve a sus rasgos de carácter en la crianza y “la alaba.” Él se jacta de que entre las mujeres “mas tú sobrepasas a todas” (v. 29). A sus ojos, no hay ninguna que legítimamente puede decir que es su igual.
SU ESPIRITUALIDAD
En séptimo lugar, la verdadera grandeza de esta mujer es su devoción espiritual. Ella “teme al Señor” (v. 30). “Gracia” y “belleza” solo “engañosas” y “vanas.” Su atracción real para él es su reverencia a Dios. Incluso los líderes de la ciudad la “alaban” en las “puertas” (v. 31), reconociendo la integridad de su vida. Su marido premia su fidelidad e industria. Él es el más bendito de los hombres.
¿No es de extrañar que su marido confíe en ella? La realidad de Dios en su vida le hace digna de su plena confianza. Por cada estimación, ella es “la corona de su esposo” (12:4). Sólo Dios puede proporcionar una excelente compañera.
¿El Señor te ha dado esa mujer virtuosa? ¿Puede ver cómo es especialmente diseñada para usted? ¿Reconoce usted cómo ella ha hecho que su eficacia para el Señor hay aumentado? Entonces, de gracias a Dios por una mujer en la que su corazón confía.
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