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Ejercitate para la piedad

por Veronica Vilugron.
Mujer de grande estima delante de Dios"

Al NO conocer bien el rol de la mujer cristiana, caemos en errores.
La Biblia nos muestra claramente cómo debe actuar una mujer que ama a Dios.
...

El gran problema

Nos hemos amoldado a esta sociedad, vivimos como cualquier mujer de este mundo.
Tenemos hábitos que no son agradables a Dios.
Consciente o inconscientemente, este mundo nos deslumbra con sus placeres.

Gastamos nuestro tiempo en saciar deseos propios, en actividades que nos producen placeres momentáneos, a pesar de su corta duración.
Así nos encontramos invirtiendo horas en actividades que Dios no nos nos ha confiado.

Hemos fortalecido la idea errónea que pasar tiempo con nuestros hijos y ocuparnos de nuestro hogar, no nos da ningún beneficio, ya que a veces este fruto lo vemos con los años.
Esto nos frustra y así, nos hemos desviado del propósito para el cual Dios nos creó.

Nuestra solución

Volver a Cristo. Debemos dejarnos moldear por él.
Si comenzamos a vivir todo lo que aprendemos en la Palabra de Dios, producirá en nosotras un carácter piadoso.

1 Timoteo 4:7:
“Ejercítate para la piedad”.
Debemos ejercitarnos en cultivar una vida piadosa.
Un carácter agradable delante de Dios. Como lo era la Mujer que habla Proverbios.
Proverbios 31:10:
“Mujer virtuosa, ¿quién la hallará?
Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas”.

No nos dejemos engañar por los placeres que ofrece este mundo, los cuales son vanidad, un espejismo, como una neblina que desaparece.
Conozcamos y confiemos en la voluntad de Dios para nosotras como mujeres.

1 Pedro 3:4 “Vístanse con la belleza interior, la que no se desvanece, la belleza de un espíritu tierno y sereno, que es tan precioso a los ojos de Dios”.

No olvidemos que ésta es una mujer que destaca en cualquier época, no pasó de moda, ni está diseñada para épocas más antiguas. Sigue vigente el día de hoy como ejemplo a seguir.

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