Ir al contenido principal

Conoce la historia de Laura Pérez

Me enteré de Aviva Nuestros Corazones a través de Revive Our Hearts. Yo escuchaba los programas de Nancy casi todos los días en mi carro en el camino al trabajo y de regreso. Me encanta como Nancy puede tomar la Verdad de Dios, que se encuentra en la Biblia, y aplicarla a las vidas de las mujeres. Cambió mi forma de pensar sobre temas como la pureza, la familia, la mujer, la ropa y apariencia; y me enseñó cómo ser mentora y mostrar hospitalidad a otros. Para mi Nancy es una de mis mentoras que me enseña la Palabra de Dios, y me muestra cómo aplicarla a la vida cotidiana—algo que no siempre es fácil.
Después me enteré de Aviva Nuestros Corazones a través de una carta informativa que mandó Revive Our Hearts. En la carta informativa nos pedían que consideráramos como podríamos ayudar en el ministerio para alcanzar las mujeres de Latinoamérica. No mucho después envié un correo a ROH para ver si podía asistir en la traducción de materiales. Y así es como empecé a ayudar a traducir los programas de ROH al Español.
Ha sido una gran bendición traducir los programas porque muchas veces Dios usó lo que estaba traduciendo para hablar a mi vida, precisamente lo que necesitaba escuchar. Mi interés en los programas traducidos empezó a crecer, y les bajé algunos a mi mamá, a mi abuela, y a mi amiga de la iglesia. Sabía que iba ser algo impactante porque no hay nada igual a los programas de Nancy. Vi cómo Dios usó los programas para traer luz a ellas cuando había tinieblas en sus vidas. Para mi abuela, que vive en México y no es posible que asista a una congregación, es una manera de conectarla a las enseñanzas de la Palabra.
Ser parte de este ministerio para alcanzar a las mujeres de lengua hispana, es un privilegio y  un honor que me ha dado Dios. Sé que Dios va impactar a muchas otras mujeres  alrededor del mundo a  través de estos programas.
Este artículo procede del Ministerio Aviva Nuestros Corazones ® www.avivanuestroscorazones.com
El material publicado en esta página se encuentra disponible para ser compartido gratuitamente, en cuyo caso, agradecemos su integridad  al citar la fuente en respeto a nuestros derechos de autor. Queda prohibida toda reproducción con fines comerciales.
Para más información acerca de nuestra política de permisos: Permisos

SOBRE EL AUTOR

Laura  Pérez

Laura Pérez

Laura Pérez sirve en su iglesia, ubicada en el sur de California, como líder y maestra de jóvenes. Así, el Señor la llevó a obtener una maestría en Consejería Bíblica para estar mejor equipada en el conocimiento de la verdad de Dios para aconsejar a las jóvenes que sirve.
Debido a que sirve en una congregación hispana en los Estados Unidos, el Señor puso en su corazón el deseo de hacer disponibles más recursos para la enseñanza de la verdad de Dios a las niñas y mujeres de las comunidades de habla hispana. 
El Señor la llevó a participar en la traducción de currículum para niños de su iglesia y luego a ser traductora de los programas de Revive Our Hearts del Inglés al Español.
Durante la semana, trabaja con niños con necesidades especiales para enseñarles habilidades sociales y de juego. A medida que su corazón es movido por estos preciosos pequeños, ella desea continuar sirviéndoles siguiendo una carrera en terapia 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Considera los caminos de su casa

por Verónica Vilugrón Proverbios 31:27  “Considera los caminos de su casa, Y no come el pan de balde”. En otra versión dice:  “Ella observa, vigila como van las cosas en su familia, y el pan de la ociosidad no comerá.”  Podemos observar que esta mujer además de ser cuidadosa de su hogar, rechazaba una actitud de pereza, no perdía el tiempo, no lo gastaba inútilmente. Todo lo que tenía era por su esfuerzo, trabajo y diligencia, no es que lo que recibía venía de la nada. Esta mujer es consciente de que su trabajo es importante y no solo para ella, sino que su velar y vigilar la ayuda a tener un buen fruto en sus hijos y esposo.  Ella no come del pan que no se ha ganado con esfuerzo.  Juan 6:27 "Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre" Ella lucha por la vida que permanece para vida eterna. Clamemos a Dios que Él abra nues...

Filipenses 3:8,9

Filipenses 3:8,9 Así es, todo lo demás no vale nada cuando se le compara con el infinito valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por amor a él, he desechado todo lo demás y lo considero basura a fin de ganar a Cristo y llegar a ser uno con él. Ya no me apoyo en mi propia justicia, La idea básica de felicidad de este mundo caído es que si perseguimos y alcanzamos estos 4 pilares (los planes, deseos, sueños y metas propios), seremos felices. “Presentar nuestros cuerpos en sacrificio” es clavar en una cruz esta idea básica (Juan 12:25). Pero, algo muy importante que debemos tener claro, es que NO se trata de abandonar algo superior por amor a algo inferior. Contrario a lo que quizás puedas imaginar, NO se trata de renunciar a tu felicidad, o algo que valoras mucho, por amor a Cristo. ¡NO! Cada vez que el piadoso "presenta su cuerpo en sacrificio” lo hace dejando algo inferior por algo superior. ¡Dios NUNCA te pide que renuncies algo superior por algo inferior! Fuente:  https:/...

La falibilidad y los profetas femeninos

Gracia a Vosotros ::  Desatando la Verdad de Dios, Un Versículo a la Vez La falibilidad y los profetas femeninos Código: B140317 John MacArthur En mi último artículo, comencé a considerar los comentarios de John Piper en el episodio 215 de la emisión del programa Pregúntele al Pastor John. Interactuando con sus afirmaciones interpretativas, el artículo se extendió bastante; por lo que decidí tener compasión por el lector, finalizar ese artículo y retomar donde quedé. Para ponerlo al corriente, aquí está la definición del don de la profecía que John da en el episodio 215: Yo considero [al don de la profecía] como algo que espontáneamente Dios trae a la mente en el momento; y ya que somos falibles en el modo en cómo lo percibimos y el modo en cómo reflexionamos acerca de eso y el modo en cómo lo expresamos, no tiene ese mismo nivel infalible, de autoridad de la Escritura.[1] Como lo he señalado anteriormente, esa es una desviación sustancial...